jueves, 28 de septiembre de 2017

FONDO: DESOLACION DE LOS ABISMOS
















*Hugo R. Fernández Campos 


En la sinrazón de los problemas que toca vivir la negación de lo padecido es una respuesta inmediata de la flagelación y auto conmiseración.

De las preguntas - ¿Por qué yo?-, -¿Por qué a mí?- se desprende los primeros desafíos de las respuestas que se habrán de buscar y encontrar desde el cuestionamiento del amor de Dios, pasando por la maldición de los astros, la mala herencia genética, la posición de clase económica y social hasta toparse de frente con los ojos, el rostro y cuerpo de un ser que tiene tiempo que no lo volteamos a ver por estar enfrascados en la lucha por la subsistencia material o emocional para alimentar a otro u a otros y olvidarse de nosotros mismos. 

El acto de encontrar las primeras respuestas a las preguntas, conforma la estructura de una serie de argumentos que deberán de destruir parte del discurso de la descripción anterior de como concebíamos nuestra propia existencia, cambiando el lenguaje y enfoque distinguiendo de lo que no contribuyo al bienestar y poniendo a salvo lo bien vivido. 

La experiencia fatal de la orfandad o de la pérdida de un hijo, hará buscar y encontrar respuestas que den alivio al dolor inconmensurable del alma, ya sea en el refugio de la aceptación de un mandato de Dios o en el entendimiento de que el universo da y quita,  compensa y contribuye en una dinámica en la que la dualidad vida-muerte es solo parte de un ciclo que los seres vivos tarde que temprano debemos experimentar.  

Vivir y llorar la locura del dolor, saber que después de del fondo hay más fondo y reconocer que la muerte misma es parte de la soluciones cuando las enfermedades generan más sufrimiento es empezar a comprender que resistir, aferrarse y luchar contracorriente implica hundirse más que en vez de salir a flote.  

En la práctica del rafting, descenso de ríos caudalosos y con alto grado de peligrosidad, la navegación se hace en una pequeña balsa que tiene como características ser de pastico e inflada con aire, es ligera, así que navega en la superficie del rio en aguas mansas  y turbulentas, en zonas con caídas de agua abundante salen volcarse, nunca se hunden, salvo que se desinflen, se hunden los tripulantes que sumergidos en los remolinos formados por la corriente intensa de agua en el fondo de la cascada nadar se hace imposible,  así que se recomienda soltar el cuerpo y esperar que la corriente misma te expulse a la superficie, poner resistencia a esa fuerza genera exactamente lo contrario. 

Lo que resiste persiste, comprender los problemas son retos que hay que resolver y dejar ir a personas o situaciones que no contribuyen a la tranquilidad y bienestar cotidiano será un buen comienzo para rebasar el apego e iniciar la veces que sean necesarios nuevos comienzos en una de esas descubriremos que el gran mandato de la naturaleza es tratar de permanecer vivos y saludables solo o acompañados de quien esté dispuesto a contribuir  con el gran propósito de la vida que estar y ser felices.

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